Triduo Pascua Juvenil 2001

ENTRÉGATE

A LOS

DEMÁS

 

 

ENCUENTRO GENERAL

Llegada

Música…. Cantos…. Animación.

Inscripciones.

Dinámica de presentación.

Bienvenida.

Oración: Oración de Charlie

Dios, Padre Santo,

que de la fuente del Misterio Pascual

llenaste al venerable Carlos Manuel (Charlie)

de vida nueva y fortaleza en su vocación laical, concédenos a todos los bautizados a seguir los pasos del sacrificio de Cristo y alcanzar el gozo eterno de su resurrección. Por Jesucristo nuestro Señor.

 

Introducción

Presentación del Tema, Objetivo, Lema y Logos de la Pascua.

Sentido de la Pascua Judía, Pascua de Jesús, Pascua Cristiana ...

Introducción al Jueves Santo:

-Presentar el Sentido del Jueves Santo, el Tema y Objetivo de éste.

 

Primer momento:

Amor Incondicional

 

1. Lectura dramatizada: Jn. 13, 1-20.(Lavatorio de pies) La lectura será narrada, mientras se dramatiza. (Luego, el joven que personificó a Jesús se dirigirá a los jóvenes con la siguiente palabras.)

Hola, ¿cómo están? Me alegro mucho de verlos aquí. Muchos pensarán que vinieron simplemente a conocer nuevas personas o a complacer a alguien que los invitó. Pero, no es así. La verdad es que yo los he llamado. Si están aquí es por algo. ¿No creen que es así? Pues sí, la verdad es que necesito de cada uno de ustedes. Como saben, el mundo en que vivimos no es nada fácil. Son muchos los que están afuera y necesitan urgentemente de ustedes que son la sal de esta tierra. Pero antes de ir afuera, necesitamos empezar por ayudarnos a nosotros mismos. Como ven, yo hice lo mismo con mis discípulos. Mediante el lavado de los pies, les di de mi sencillez, mi humildad, y sobre todo, mi gran amor. Dirán que estoy loco, que yo, Jesús, estoy bien loco. ¿Quieren saber algo? Sí, estoy bien loco, loco de amor por todos ustedes. Por amor, les he dado a sus padres, a sus hermanos. Por amor, te he dado a esos amigos con quienes compartes tanto. Por amor, te di la vida, te doy el alimento que necesitas cada día. Me gustaría que también ustedes se volvieran locos de amor. Por esto los he llamado, por esto están aquí.

 

2. Gesto.

Se divide el grupo en parejas. Ya divididos, el primero -con una rodilla en el suelo- le lavará y secará las manos a su pareja, y luego de esto, le besará las palmas de las manos y así, lo mismo hará el otro.

 

3. Compartir experiencia.

Reunidos en asamblea, un moderador les preguntará a los jóvenes cómo se sintieron. La finalidad de esto es que compartan sus experiencias.

 

4.Reflexión:

A ustedes que están aquí presentes. Hoy, nuestro Señor Jesucristo viene para decirles lo mucho que los necesita. Él quiere expresarles lo mucho que los ama, decirles que siempre está con ustedes en todas partes y aunque no se den cuenta que Él está a su lado no se enoja, al contrario los ama y los protege mucho.

 

Ustedes que están ahí sentados, pensativos, quiere pedirles que amen a su prójimo como Él los ama sin condiciones ni ataduras. Sean humildes y sencillos, piadosos y bondadosos, honrados y apacibles. No le den la espalda a aquel que los necesite, porque si lo hacen se la estarán dando a Él también.

Ámense a ustedes mismos, amen a su prójimo, amen la naturaleza. En fin, amen a todos con sus defectos y virtudes. Recuerden que el símbolo de amor más grande que Jesús les ofrece es entregar su vida por cada uno de sus pecados y nunca se ha quejado, ni lo va hacer. Den sus vidas, entreguen sus vidas a los demás y verán su rostro en cada persona a la que ayuden. Nunca olviden que siempre los amó, los ama y los amará no importa lo que hagan. A decir verdad, hay algo especial en cada uno de ustedes y por eso Jesús los ama tal como son.

 

 

Segundo momento:

Jesús, legado de amor

 

Introducción:

Un joven moderador preguntará a los jóvenes: ¿qué es la Eucaristía? Después de recoger las opiniones de varios jóvenes, les explicará la Eucaristía.(Proponemos el siguiente esquema a seguir.)

 

Tema: La eucaristía.

(Leer Lucas 22, 14 20)

El Jueves Santo nos trae el recuerdo de aquella última cena en la que el Señor le manifiesta a sus discípulos: "¡Cuánto he deseado celebrar con ustedes esta cena de pascua antes de mi muerte!". En aquel momento nos dice también el evangelista Juan que Jesús "habiendo amado a los suyos que estaban en el mundo los amó hasta el extremo." La clave para entender lo que la Eucaristía significa la tenemos en esas dos expresiones que son a la vez circunstancias de la institución de este sacramento.

En primer lugar el contexto despedida que rodea la última Cena nos permite imaginarnos cuáles eran los sentimientos de Jesús en aquella hora en la que estaba ya cercana su muerte. Y podemos pensar también en cuales eran los sentimientos de sus apóstoles al escuchar hablar a Jesús de aquella manera. En segundo lugar, Jesús ama intensamente a sus discípulos, hasta el extremo". Es en estas dos circunstancias que Jesús dejará a sus discípulos, y a nosotros, su testamento".

Tenemos por lo tanto, una despedida que se da entre personas que se aman. Es en ese momento donde Jesús logra lo que nosotros no podríamos lograr. Imaginemos a dos personas que se aman y tienen que despedirse porque una de ella se va a un largo viaje. Seguramente en la despedida se dirán tantas cosas. ¡Tantos consejos, compromisos de llamarse o escribirse con frecuencia, peticiones mutuas de cuidarse etc.! A lo mejor también intercambian fotos para sentir más cerca la presencia del otro(a). En aquel momento el que se aleja desearía poder irse y al mismo tiempo quedarse. Pues eso mismo fue lo que hizo Jesús en la Eucaristía. En este sacramento encontró el modo de quedarse entre los suyos con una presencia real y verdadera. En la Eucaristía Jesús con su poder realiza el milagro de amor de quedarse presente en un pedazo de pan y un poco de vino que dejan de ser tales para convertirse en su cuerpo y en su sangre. Por nuestra fe creemos que lo que comulgamos es realmente a Cristo con su cuerpo, sangre, alma y divinidad.

 

Eucaristía, memorial del sacrificio de la cruz.

Al celebrar la última cena con sus apóstoles en el transcurso del banquete Pascual, Jesús dio su sentido definitivo a la Pascua Judía. En efecto el paso de Jesús a su Padre por su muerte y su resurrección, la Pascua Nueva que nos hace pasar de la esclavitud del pecado a la libertad de los hijos de Dios, es anticipada en la Ultima Cena y celebrada en la Eucaristía que da cumplimiento a la Pascua Judía y anticipa la Pascua Final de la Iglesia en la gloria del Reino. Por eso, la Iglesia nos enseña que Jesús, "para dejarnos la prenda de su amor, para no alejarse nunca de los suyos y hacerlos partícipes de su Pascua instituyó la Eucaristía como memorial de su muerte y de su resurrección y ordenó a sus apóstoles celebrarlo hasta su retorno."

La eucaristía es, pues, un sacrificio, porque representa (hace presente) el sacrificio de la cruz, porque es un memorial y aplica su futuro, que es la salvación de los hombres. El sacrificio de Cristo y el sacrificio de la misa son un único sacrificio; "Es una y la misma víctima, que se ofrece ahora por el ministerio de los sacerdotes, que se ofreció a sí misma entonces sobre la cruz. Sólo difiere la manera de ofrecer." Este aspecto de sacrificio y muerte aparece simbolizado en el hecho de consagrar por separado el pan y el vino; la separación del cuerpo y la sangre nos recuerdan que en la cruz la sangre derramada de Jesús se separó de su cuerpo. Sin embargo, hay otro memento de la celebración eucarística donde el sacerdote echa un pedazo de pan consagrado (Cuerpo de Cristo) en el cáliz, signo que puede interpretarse como la unión de su cuerpo y su sangre, es decir, nos recuerda que al Cristo que recibimos en la Eucaristía es el Cristo Vivo, al resucitado.

La Eucaristía es el sacrificio de la Iglesia. La Iglesia que es el Cuerpo de Cristo, participa en la ofrenda de su cabeza. Con El, ella se ofrece totalmente, en la Eucaristía el sacrificio de Cristo es también el sacrificio de los miembros de su cuerpo. La vida de los fieles, su alabanza, su sufrimiento, su oración y su trabajo se unen a los de Cristo y a su total ofrenda, y adquieren así un valor nuevo. El sacrificio de Cristo presente sobre el altar da a todas las generaciones de cristianos la posibilidad de unirse a su ofrenda. Esto es lo que en cierta manera queda simbolizado cuando el sacerdote durante la misa echa un poco de agua al cáliz que contiene el vino. En ese momento el sacerdote dice en secreto: "Que esta agua unida a este vino sea signo de nuestra participación en la vida divina de aquel que ha querido compartir con nosotros nuestra condición humana." En el vino está representado Cristo y en el agua nosotros que nos unimos a El para , juntamente con El, ofrecernos al Padre.

 

Los signos de pan vino.

En el corazón de la celebración de la Eucaristía se encuentra el pan y el vino que, por las palabras de Cristo y por la invocación del Espíritu Santo, se convierten en el Cuerpo y la Sangre de Cristo. Al ocurrir esta conversión siguen significando también la bondad de la creación. Así, en el ofertorio, damos gracias al Creador por el pan y el vino, fruto "del trabajo del hombre", pero antes, "fruto de la tierra" y "de la vid", dones del Creador. En la antigua alianza, el pan y el vino eran ofrecidos como sacrificio entre las primicias de la tierra en señal de reconocimiento al Creador. Pero reciben también una nueva significación en el contexto del Exodo: los panes ácimos que Israel come cada año en la pascua conmemoran la salida apresurada y liberadora de Egipto. El recuerdo del maná del desierto sugerirá siempre a Israel que vive del pan de la palabra de Dios. Finalmente el pan de cada día es el fruto de la tierra prometida, prenda de la fidelidad de Dios a sus promesas. El "Cáliz de Bendición", al final del banquete Pascual de los judíos, añade a la alegría festiva del vino una dimensión que recuerda la alegría eterna en el cielo al final del mundo. Jesús instituyó la Eucaristía dando un sentido nuevo y definitivo a la bendición del pan y el vino que anticipan para nosotros la alegría del banquete eterno en el cielo.

 

La Eucaristía, según el venerable Carlos Manuel Rodríguez.

La Eucaristía fue el centro de su vida. A la Eucaristía llevaba todo lo que él era y de la Eucaristía sacaba todo lo que él necesitaba. Le molestaba que hablase de la Eucaristía y de la Liturgia como "ritos" y "rúbricas". Para él la liturgia era Cristo, con todo lo que Cristo es y con todo lo que Cristo hace por nosotros. El Crucificado-Resucitado está presente en ella en toda su realidad humana y divina. Carlos Manuel constantemente hablaba a todos de la Eucaristía, de su incalculable valor y casi no encontraba palabras para expresar lo que sentía por ella porque "sólo el que pasa por eso lo sabrá sentir, más no decir." Ese amor a la eucaristía databa de sus primeros años de vida, especialmente de sus experiencias como monaguillo cerca del altar en las grandes celebraciones litúrgicas de la Iglesia. Lo que él descubrió en la eucaristía nunca dejó de inculcarlo en los demás. (Tomado de los documentos del Proceso de Beatificación).

 

Trabajo en grupo:

 

1. ¿Qué significaría el momento de la Ultima Cena para los discípulos?

2. ¿Qué significado tenía la Eucaristía para el venerable Carlos Manuel?

3. ¿Qué significado tiene para tí como joven la Eucaristía?

 

Sugerencias para el siguiente momento:

-Puede realizarse un plenario y luego una conclusión o un ágape.

 

 

Ágape

Colocar una mesa en el centro preparada adecuadamente con el pan y el vino para todos. (Si son muchos los participantes pueden disponerse varias mesas y formar varios grupos grandes y cada uno celebrará su ágape.) Para celebrar el ágape se seguirá el siguiente esquema:

• El animador explicará lo que se va a realizar, y luego hablará de lo que significa ágape.

La palabra ágape viene del griego y significa amor, amor fraterno, gratuito, caridad. Entre los primeros cristianos significaba la cena fraterna que precedía a la eucaristía. El ágape es un compartir; un compartir singular, en el cual no se entrega el cuerpo de Cristo, pero sí se entrega el amor a los demás en forma de celebración. En este ágape, compartiremos el amor que nos ha dado Jesús, y lo haremos compartiendo la alegría y la paz, el pan y el vino.

• Compartir experiencias: Se invita a los jóvenes a que compartan las respuestas a las preguntas de la división de grupos anterior.

• El animador hará una síntesis de lo expresado por todos.

• Momento de compartir el pan y el vino.

• Conclusión del ágape: Después de haber compartido el pan y el vino, como lo hizo Jesús con sus discípulos, se invita ahora a compartir algo nuestro con los demás. Se explicará que cada uno en ese momento estará limitado para poder compartir algo material pero que hay algo que de inmediato puede compartir: su amor. El compartir el amor se expresará dándole un abrazo a los demás.

 

(Dentro del ágape se puede incluir el compartir el trabajo en grupo y la conclusión de esta parte.)

 

 

Tercer Momento

Todos somos llamados

 

DRAMA: Vocación Sacerdotal

(Diálogo en la sala de una casa)

Hijo: Madre, Jesús me ha llamado. Quiere que yo le siga, que ayude al necesitado, que salga de mí y me dé más a los demás. Quiere que proclame el Evangelio y que les dirija para que ganen el Reino de Dios.

Madre: ¿Y qué?… Eso no es nuevo. ¿No ves cuántas personas hay que están haciendo lo mismo? Tú ayudas a los demás, a los vecinos, a tus amigos y a mí. ¿Qué más quiere El?

Hijo: Quiere que yo me despeje de todo y me dedique a seguirlo. Quiero vivir sólo para El.

Madre:¿Cómo es eso de despojarte de todo? Después que yo he gastado tanto en tí, vas ahora por un capricho a dejarlo todo? ¿Quién te está metiendo eso en la cabeza? Seguramente alguien que te tiene envidia.

Hijo: Madre, nadie me ha metido nada en la cabeza. Sólo quiero seguir el consejo evangélico de Jesús.

Madre: (Malhumorada) ¿Quién entiende a los hijos?…

Hijo: (Con mucha calma) Madre, tú puedes entenderme si me escuchas. Por favor, siéntate y escúchame.

Madre: (Se sienta) Bien, ya estoy sentada, dime, te escucho.

Hijo: Madre, recuerdas el pasaje que hemos escuchado en diferentes ocasiones sobre lo que escribió Pablo a los Filipenses.

Madre:Con tanto que él ha escrito, ¿quieres tú que yo recuerde eso? Tu estás loco!!!

Hijo: (Sin prestar atención a lo dicho por su madre) Jesús, a pesar de su condición divina no se aferró a su categoría de Dios; al contrario, se despojó de todo, de su rango y tomó la condición de esclavo, haciéndose uno de tantos…

Madre: (Interrumpiéndolo) ¿Y qué con eso? Tú no eres Dios.

Hijo: Madre no soy Dios, pero puedo y quiero ayudarle en su Plan de Salvación.

Madre: (Mirándolo incrédula) ¿Qué quieres decir?… ¿No es lo que estoy pensando verdad?

Hijo: (Mirándola fijamente y decidido) Sí madre, eso que piensas es lo que deseo. Quiero encontrar el Camino para llegar al Reino. Quiero encontrar la Verdad para ser libre. Quiero buscar la Vida que es Jesús. Quiero ser sacerdote, madre. Dame tu bendición.

Madre:(Alarmada se levanta) ¿Qué tu dices? ¿Te has vuelto loco? No te das cuenta que ser sacerdote es dejarlo todo. Dejar sus padres, su hogar, sus amistades, sus comodidades. No te has dado cuenta cuánto sufre un sacerdote? ¿Cuánto se sacrifican? Además, a todos los critican muchísimo.

Hijo: Si madre, se todo eso. Pero más que eso sufrió Jesús por nosotros.

Madre: Sí, y lo mataron. De que le sirvió.

Hijo: Madre, a El no lo mataron. El dio su vida por todos nosotros. Por tí, por mí, por sus amigos, por sus enemigos…

Madre: (Terca) Pues yo te digo que no, no y no. (Dando en la mesa)

Hijo: Madre, eso es lo que quiero hacer. Dar mi vida poco a poco por los demás. Quiero decir sí al llamado. Tengo derecho a escoger esa verdad que me hará libre.

Madre:¿Libre? ¿Cuándo tu has visto a un sacerdote libre? Siempre tienen que hacer lo que dice la Iglesia, el Papa, los obispos…

Hijo: (Interrumpiéndola) Pero madre… Eso es parte de los consejos evangélicos: Obediencia, Pobreza y Castidad.

Madre: (Su malestar aumenta) Dije que no y se queda no. ¿Estamos?

Hijo: (Triste) Siento mucho que pienses y sientas así.

Madre: Por última vez no. Si lo haces, allá tú con tu conciencia.

Hijo: (Se queda callado. Reflexiona con las últimas palabras de su madre. La mira con pena, se levanta, baja la cabeza y sale de escena. Su madre malhumorada sale también.)

Narrador: Después de aquella conversación decide irse lejos a un Seminario para formarse para ser sacerdote.

Pasó el tiempo y un día su madre recibió una carta muy importante.En la carta invitaban a la madre del joven a su ordenación sacerdotal, que se llevaba a cabo fuera del país.

Narrador: La madre decidió asistir a la ceremonia de ordenación. Fue una ceremonia impresionante. Al terminar ésta, el hijo, ya sacerdote (revestido con alba y casulla), se acerca a ella. Ella gozosa e abraza a él, llora, pide perdón y le dice:

Madre: Hijo, te creía perdido y te he encontrado. Bendito sea Dios!!! Tenías razón, la verdad te hizo libre y escogiste el mejor Camino, escogiste la Verdad y escogiste la Vida.

Hijo: Madre, físicamente estaremos alejados pero estaremos juntos siempre en Cristo, Jesús. El te ama madre y me ama a mí. Y nos ama a todos. (Se abrazan)

 

Charla: El sacerdocio

En la última cena juntamente con la Eucaristía Jesús instituye el ministerio de los sacerdotes que serán los encargados de cumplir en el tiempo el mandato de hacer en conmemoración suya lo que El realizó en la última cena.

Es un hecho que en todo contexto cultural se encuentra la presencia de una persona dotada de determinadas características socio-religiosas, llamada comúnmente sacerdote, y cuya función principal es la de ser mediador reconocido oficialmente entre el hombre y Dios, entre el contexto socio humano y el mundo divino (sacerdote viene de "sacra dare" = dar o el que da las cosas sagradas). El sacerdote tiene así la función de servir de "puente" entre Dios y los hombres. Esa función la ejerce como un ministro, es decir, como un servicio a la comunidad.

Ya antiguamente el pueblo de Israel, el pueblo elegido, fue constituido por Dios como un "reino de sacerdotes y una nación consagrada." Pero dentro del pueblo de Israel, Dios escogió una de las doce tribus, la de Leví, para el servicio litúrgico. Un rito propio consagró los orígenes del sacerdocio de la Antigua Alianza. En ella los sacerdotes fueron establecidos para anunciar la Palabra, "para intervenir a favor de los hombres en lo que se refiere a Dios, para ofrecer dones y sacrificios por los pecados" y restablecer la comunión con Dios. Este sacerdocio del Antiguo Testamento, sin embargo, era incapaz de realizar la salvación, que sólo podría ser lograda por el sacrificio de Cristo. Ese sacrificio redentor de Cristo es único, realizado una vez por todas y es el que se hace presente en el sacrificio eucarístico de la Iglesia. Lo mismo acontece con el único sacerdocio de Cristo: es sólo uno, del cual participamos todos aunque de modo distinto; los fieles laicos participan del sacerdocio de Cristo por el sacramento del bautismo y los sacerdotes participan de ese sacerdocio, además de por el bautismo, por el sacramento del orden.

 

Sacerdocio común o bautismal.

Cristo, sumo sacerdote y único mediador, ha hecho de la Iglesia "un Reino de sacerdotes para su Dios y Padre". Toda la comunidad de los creyentes, por el bautismo, como tal es sacerdotal. Los fieles ejercen su sacerdocio bautismal a través de su participación, cada uno según su vocación propia, en la misión de Cristo, Sacerdote, Profeta y Rey. Los bautizados son consagrados como sacerdocio santo para que por medio de toda obra del hombre y de la mujer cristianos ofrezcan sacrificios espirituales y anuncien a Aquel que los ha salvado. Todo Cristiano está invitado a ofrecerse a sí mismo como hostia viva, santa y grata a Dios" y a testimoniar su fe mediante sus obras en su vida diaria.

 

Sacerdote ministerial.

Además del sacerdocio común de todos los bautizados Jesús, instituye el sacerdocio que se conoce como ministerial o jerárquico, obispos y presbítero (sacerdotes ). Ese sacerdocio ministerial se recibe en el sacramento del orden que es el sacramento gracias al cual la misión confiada por Cristo a sus apóstoles sigue siendo ejercida en la Iglesia hasta el fin de los tiempos . En el servicio que presta el sacerdote a la Iglesia es Cristo mismo quien se hace presente como Cabeza del cuerpo, que es su Iglesia, Pastor de su rebaño. Es lo que la Iglesia expresa al decir que el sacerdote, en virtud del sacramento del orden, actúa "en la persona de Cristo" , como otro Cristo. Esto se realiza de manera especial en la Santa Misa donde el sacerdote presta sus manos y y su voz a Cristo para que vuelva a hacerse presente en la Eucaristía, cumpliendo así el mandato que el Señor había dado de repetir aquel gesto de la última cena en conmemoración suya.

Ese sacerdocio es ministerial y eso significa que es un servicio. Está enteramente referido a Cristo y a los hombres. Depende totalmente de Cristo y de sacerdocio único, fue instituido a favor de los hombres y de la comunidad de la Iglesia. El sacramento del orden comunica "un poder sagrado", que no es otro que el de Cristo. El ejercicio de esta autoridad debe, por tanto, mediarse según el modelo de cristo, que por amor se hizo el último y el servidor de todos.

El sacerdocio ministerial no tiene solamente por tarea representar a Cristo ante la asamblea de los fieles, actúa también en nombre de toda la Iglesia cuando presenta a Dios la oración de la Iglesia y sobre todo cuando ofrece el sacrificio eucarístico.

 

Sacerdocio según el venerable Carlos Manuel Rodríguez.

Admiraba mucho el sacerdote y la vida religiosa. De cada orden o congregación religiosa admiraba una característica particular, pero aparentemente en ninguna encontraba la totalidad de sus aspiraciones. Si alguna vez pensó en le sacerdocio como opción para él no se podría decir. El nunca lo comunicó. Más tarde en la vida algunos sacerdotes amigos suyos pensaban que con los conocimientos, la formación y la práctica religiosa que él tenía podría recibir el orden sacerdotal sin necesidad de estudios formales. El los escuchaba… realmente su vocación en la vida era otra.

Fue siempre amante y defensor de la Iglesia, del papado, de los obispos y de los sacerdotes. Su amor y fidelidad a Cristo se manifestó siempre en un amor y fidelidad iguales a la Iglesia y al Papa. Tenía muchos amigos seminaristas y sacerdote. Les escribía, les enviaba artículos y libros que pudieran ayudarles y los recibía en su casa o acudía a visitarlos cuando éstos solicitaban su ayuda o consejo. Buscaba dirección en los sacerdotes. Intentaba encontrar uno que lo pudiese entender y ayudar en su misión en la vida. Al fin encontró uno que le pareció mejor que los que antes había tenido y bajo su dirección permaneció el resto de su vida.

 

 

Reflexión Final.

 

JESÚS, lavaste los pies a los apóstoles, para enseñarnos a ser humildes y misericordioso.

JESÚS, convertiste el pan y el vino en tu cuerpo y sangre para que nosotros tus hijos recibamos el cuerpo resucitado y fortalezcamos la comunión contigo y los participantes de la mesa.

JESÚS, ofreciste en sacrificio tu vida, te santificas y santificas al sacerdote para que sea digno de ofrecer tu cuerpo y sangre, y siempre reconozcamos nuestra alianza.

JESÚS, gracias porque por tu amor nos ha liberado del pecado, haz que este amor transforme nuestras vidas.

 

 

 

Celebración de la cena del

Señor con la comunidad parroquial.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

JESÚS

A

MUERTO

 

 

 

A. Encuentro General

Oración

Sentido del viernes Santo.

(Para este día sugerimos realizar un vía crucis. Presentamos una forma tradicional y un vía crucis más corto, puede ser utilizado el que se desee)

Vía crucis # 1. En este se han seleccionado algunas estaciones del vía crucis, sugerimos que cada una de ellas sea actualizada con un pequeño drama que represente la estación en cada momento. Luego se puede hacer en cada estación una meditación corta para interiorizar el hecho, buscando resonancia en cada uno de los participantes. Al lado de cada estación sugerimos una posible adaptación.

Estaciones:

Jesús es condenado a muerte…."Jóvenes abandonados". (Cuando los jóvenes no son comprendidos desde su propia realidad y son señalados sin criterios o conocimientos para hacerlo. Se generalizan los juicios por un caso en particular. No se acompañan en el proceso normal de adaptación a la sociedad)

Jesús carga con la cruz…."Nosotros más Jesús cargamos la cruz". (No queremos cargar, porque la cruz se ha visto como un castigo, una condenación un suplicio.)

 

Jesús cae por primera vez…."Depresión en los jóvenes". (No aceptación de la propia realidad y se hunden en sí mismos pensando que las cosas son demasiado difíciles y que no tienen solución)

Jesús cae por segunda vez…"Debilidad en las tentaciones". (La sociedad incita al consumo y a los vicios. Existen un sinnúmero de jóvenes que se dejan llevar de esos slogans y caen continuamente en ellos. Hay caídas consientes sin valorar los daños que causan.)

Jesús es despojado de sus vestiduras… "Jóvenes despojados de su pureza". (La sociedad incita al mal uso de la sexualidad y a desvalorizar el acto sexual. Los jóvenes son víctimas de todo esto ya que ellos son los primeros invadidos por este tipo de propaganda.)

Jesús es clavado en la cruz… "Crímenes sin un porqué". (Asesinatos que no tienen explicación o que son por causas ajenas. )

Sugerimos este segundo vía crucis, que es el tradicional. Se puede hacer por pequeños grupos. Puede hacerse caminando. Colocando las estaciones en diferentes lugares. Después de cada estación se invita a reflexionar, se le puede invitar a compartir a cada joven que significa esta estación y cuando se ha sentido así en su vida. Se puede buscar algún hecho de la vida ordinaria que nos sirva para actualizar el vía crucis.

I Estación: Jesús es condenado a muerte.

Los jefes de los sacerdotes y todo el consejo supremo andaban buscando falsas acusaciones contra Jesús. Poniéndose de pie, el Sumo Sacerdote preguntó a Jesús: "En nombre de Dios vivo, te mando que contestes: ¿Eres tú el Cristo, el Hijo de Dios?" "Tú los has dicho. Además, yo les digo: de hoy en adelante ustedes verán al Hijo del hombre sentado a la derecha del Dios omnipotente". "¡Ha blasfemado! ¿Qué les parece? Es reo de muerte.

II Estación: Jesús carga con la cruz.

Pilato después de haber interrogado a Jesús, buscaba libertarlo, pero los judíos gritaban diciendo: "Si lo liberas no eres amigo del César; quien se dice rey, está en contra del César." Pilato oyó esto y se lavó las manos, diciendo: "Yo soy inocente de la sangre de este justo. Es cosa de ustedes". Y lo entregó en sus manos para que fuera crucificado.

 

 

 

III Estación: Jesús cae por primera vez.

"Velen y oren para no caer en tentación. El Espíritu está pronto, pero la carne es débil". "Ninguna tentación hasta ahora nos ha sorprendido. Dios es fiel y no permitirá que sean tentados más allá de sus fuerzas; pero con la tentación les dará también la forma de superarla y la fuerza para soportarla."

IV Estación: Jesús encuentra a su madre.

"Todos ustedes que pasaron por el camino consideren y observen si hay un dolor semejante a mi dolor." "Mira, él está puesto como causa de caída y resurrección de muchos en Israel; y también a tí, mujer, una espada te atravesará el alma."

V Estación: El Cirineo ayuda a Jesús.

"Mientras lo conducían al Calvario tomaron a un cierto Sión de Cirene, que volvía del campo, y lo obligaron a cargar la cruz".

VI Estación: La verónica enjuga el rostro de Jesús.

"No tiene apariencia, ni belleza para atraer nuestras miradas, ni esplendor para probar deleite". "Hombre de dolores que conoce bien el sufrimiento, delante del cual uno se cubre el rostro; era despreciado y sin ninguna estima".

VII Estación: Jesús cae por segunda vez.

"Como por un amigo o por un hermano, anda triste, cabizbajo y sombrío, como quien llora a su madre." "Pero cuando tropecé, se alegraron , se juntaron contra mí, y me golpearon por sorpresa."

 

VIII Estación: Jesús encuentra a las piadosas mujeres.

Lo seguía una muchedumbre de gente y de mujeres que se golpeaban el pecho y se lamentaban por él. Jesús se volvió hacia ellas y le dijo: "Hijas de Jerusalén, no lloren por mí, lloren más bien por ustedes mismas y por sus hijos". Porque así tratan al árbol verde, ¿qué harán con el seco?"

IX Estación: Jesús cae por tercera vez.

"Salve, oh Dios, he caído en aguas profundas y las olas me revuelcan. Estoy cansado de gritar y mis ojos se consumen en la espera de mi Dios." "Me levantaré e iré a mi Padre y le diré: Padre he pecado contra el cielo y contra ti, no merezco llamarme hijo tuyo."

X Estación: Jesús es despojado de sus vestiduras.

Los soldados tomaron sus vestiduras y las dividieron en cuatro partes, una para cada uno. Después tomaron la túnica, hecha de una sola pieza, y dijeron: "No la rompamos, echémosla a suerte haber a quién le toca."

XI Estación: Jesús es clavado en la cruz.

Llegaron a un lugar llamado Gólgota, y lo crucificaron, y junto a él a dos ladrones, uno a la derecha y el otro a la izquierda. Jesús decía: "Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen".

XII Estación: Jesús muere en la cruz.

Era cerca del medio día, cuando el sol se eclipsó y se obscureció toda la tierra hasta las tres de la tarde. Jesús, gritando con fuerte voz dijo: "Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu". Dicho esto, expiró.

XIII Estación: Jesús es bajado de la cruz.

José de Arimatea y Nicodemo fueron con Pilato y le pidieron permiso para bajar el cuerpo de Jesús. Lo bajaron de la Cruz y lo envolvieron en vendas de perfumes, como se acostumbra sepultar entre los judíos.

XIV Estación: Jesús es sepultado.

En el lugar donde lo crucificaron había un jardín y en este un sepulcro nuevo en el que nadie había sido puesto todavía. Si el grano de trigo que cae en la tierra no muere, queda solo; pero si muere, produce mucho fruto. Si alguno me quiere servir, que me siga. Ahí donde estoy yo, está también mi siervo".

Conclusión: En este momento invitamos a retomar las palabras de Jesús al buen ladrón: "Hoy estarás conmigo en el paraíso." Estas palabras nos ponen en clave salvífica. El sacrificio de Cristo en la Cruz no ha sido en vanos, desde aquel mismo momento, la sangre redentor salva y libera. Hoy ante esta experiencia de haber compartido con Jesús este camino de conversión. Hay que tomar una opción, lo aceptas o lo rechazas. Construyes tu vida desde ahora en adelante al lado de Jesús, aceptando su mensaje y cambiando tu vida a lo rechazas y continúas tu propio camino. La decisión es tuya.

 

CELEBRACIÓN DE LA CRUZ EN LA COMUNIDAD

 

 

 

 

VIVIMOS

PARA

ESA

NOCHE

 

 

Encuentro Común.

Animación

Oración (La oración de Charlie)

Sentido del día

 

No hay Dios.

Este primer momento del día lo queremos dedicar a hacer una reflexión sobre el acontecimiento de la muerte. No sólo la muerte en sentido de dejar de existir, o como un suceder del proceso humano. Sino La Muerte y en especial La Muerte de Jesús.

 

 

 

Motivación.

Invitamos a centrarnos en el sentido del día. El Sábado Santo es el momento en que toda la Iglesia espera en silencio y oración el triunfo de la resurrección, acontecimiento que es posible porque Jesús ha muerto. El momento es de silencio, por la pena, el luto, el llanto, el recuerdo de lo sucedido y hasta la desesperación. No hemos entendido el porqué de todo esto. Es necesario hacer un alto en el camino hacia la pascua y meditar. Qué sentido tiene la muerte de Cristo para cada uno de nosotros.

 

Trabajo en Grupo.

¿Has pensado en la muerte?

¿Qué significado le encuentras a todo esta de la muerte de Jesús?

Encuentras alguna esperanza en todo esto.

 

Plenario.

Reflexión:

Comenzamos un nuevo día: Sábado Santo. Un día importante en la liturgia de la Iglesia. Hoy la comunidad cristiana celebra al Señor con silencio y espera. No hay eucaristía, no hay nada. La oración, la espera y el ayuno vigilantes son las notas de este día.

Hoy es un día para la apertura a la esperanza, para confiar en que es posible algo nuevo, una vida nueva. Muchas veces se los jóvenes dicen frases como estas: "Soy una porquería" "No sirvo para nada". "No valgo nada". Yo creo que la reflexión de hoy nos puede ayudar a entender estas frase> Somos invitados a esperar en Dios y en nosotros mismos. Cada uno pude dar mucho más de sí de los que se cree.

Nos debe preocupar que haya personas que piensen así. Con ideas tan negativas es posible que sólo cosechemos aquello mismo que pensamos. El silencio del sepulcro nos lanza a la esperanza. Dios puede hacer lo que parece imposible. Dios nos lanza a esperar en él y a esperar en nosotros mismos.

Más de una vez te has sorprendido a ti mismo porque lograste hacer lo que te parecía imposible…Esta noche Dios sorprenderá a cielos y tierra abriendo la noche y saliendo de la muerte. Todo parece imposible…Pero para Dios nada hay imposible. Nada de lo negativo que veas en tí te puede llevar a decir que "no puedes ser de otra manera". Di más bien que no quieres, que no tienes voluntad para ello. Si te das tiempo, si trabajas un poco, si aportas tu granito de arena, todo será posible. (En esta línea irá el trabajo de hoy.)

Es preciso construir el futuro de vida cristiana que quieres llevar; programar un plan mínimo de comportamiento y de seguimiento cristiano. A lo largo de los días del triduo has ido viviendo aspectos esenciales de la vida cristiana. Algo puede renovarse. Algo nuevo está esperando Dios de tí. ¿Tendrás fuerzas para responder positivamente a su llamada?

Tú estás llamado a ser importante porque Dios te hace importante. Fíjate si eres portante que por tí y por mí se entregó hasta la muerte… Merece la pena entregar le algo, aunque cueste.
Nada más. Te deseo generosidad y fuerza interior para proyectar el futuro que Dios espera de tí.

 

II. Luz

La Resurrección de Jesús es el acontecimiento más importante en la vida de Jesús y en la vida de los cristianos. Veamos qué significados tiene para Jesús y para nosotros.

A. El hecho de la Resurrección

- Después de la muerte de Jesús, los apóstoles, presos del miedo y de un profundo sentimiento de fracaso, se dispersan y posiblemente vuelven a sus actividades que tenían antes de conocer a Jesús.

- Poco tiempo después estos hombres que habían huido y se habían escondido, se reagrupaban y salen a las calles de Jerusalén anunciando una noticia asombrosa: DIOS HA RESUCITADO AL QUE FUE CRUCIFICADO.

- Ellos afirman que han tenido una experiencia única, profunda: el mismo Jesús que conocieron y que había sido muerto en la cruz está vivo y presente en medio de ellos.

- ¿En qué se funda su convencimiento de que Jesús muerto volvía a estar vivo? Los evangelistas nos ofrecen dos argumentos:

· encontraron vacía la tumba de Jesús (EL SEPULCRO VACÍO);

· le han visto después de su muerte (LAS APARICIONES);

 

- Los apóstoles dicen que han visito a Jesús, que se les ha “aparecido”... ¿No serán alucinaciones...? Los evangelistas narran estas apariciones como una PRESENCIA REAL y hasta carnal de JESÚS. Come, camina con los suyos, habla con los suyos, les muestras las llagas, etc. Por eso los discípulos que lo vieron tenían a seguridad de que no era un espíritu o un ángel. El que murió y fue sepultado era el mismo que resucitó. Las apariciones por tanto, no fueron visiones subjetivas sino hechos objetivos.

- Estos encuentros con el Resucitado transforman la vida de ellos. Vuelve la confianza, el ánimo, la fortaleza, la entrega. Comienzan a ser testigos de Jesús y a proclamar su causa. Nada los detiene: ni persecuciones, ni amenazas de muerte.

- Por eso el argumento definitivo para afirmar la resurrección de Jesús se basa en las apariciones a los discípulos. Jesús, efectivamente, fue visto por los suyos, los que le conocieron y convivieron con él. Y son estos los que aseguran con fe y valentía el hecho de la resurrección. Un hecho incuestionable y seguro.

- Otra dificultad: ¿qué nos querían decir los apóstoles al anunciar que Jesús había resucitado? ¿Qué entendían por resurrección...? No es lo mismo RESUCITAR Y REVIVIR. Revivir es volver a la vida que se tenían antes de la muerte, para volver a ser otra vez un hombre mortal (esto es lo que sucedió en el caso de Lázaro que fue revivido por Jesucristo). Resucitar, en cambio, es vencer definitivamente a la muerte y escapar ya para siempre de ella... este es el caso de Jesús. Jesús no revivió sino que resucitó.

B. Significado para Jesús: la aprobación de toda una vida

- Jesús murió a causa de un enfrentamiento con los dirigentes judíos. En aquel enfrentamiento Jesús había sido el perdedor, el fracasado. Su causa parecía pérdida y derrotada. Parecía que Dios desacreditaba la pretensión de Jesús de ser su Hijo y le daba la razón a las autoridades y leyes que lo condenaban.

- La resurrección es la proclamación de que él vive, de que él tenía la razón y de que su camino es el verdadero y el único. La resurrección, por tanto, REHABILITO A JESÚS Y A SU CAUSA después del fracaso de la cruz.

- La resurrección, en otras palabras, es la aprobación de Dios a toda la vida y actuación de Jesús, es un “SI” a su mensaje, toma de postura a favor de los pobres y a las razones que dieron sentido a su vida y a su muerte. La resurrección es por consiguiente, la reprobación de los poderes religiosos y políticos que lo eliminaron. Es un “NO” a los que lo rechazaron, condenaron y mataron.

- La resurrección de Jesús es el triunfo de la vida sobre la muerte, del amor sobre el egoísmo, de la justicia sobre la justicia... La justicia de Dios ha triunfado en Jesús sobre la injusticia de los hombres.

C. Creer hoy en Jesús resucitado

- El mensaje de la resurrección no se refiere sólo a Jesús sino también a nosotros los cristianos. Si Jesús ha triunfado sobre la muerte, nosotros tenemos resuelto el problema de la muerte, porque el destino de él, es también nuestro destino. Si Cristo resucitó también nosotros hemos de resucitar. La resurrección de Jesús, por tanto, es un elemento esencial de nuestra fe y de toda la existencia cristiana.

- Creer hoy en la resurrección es creer en una nueva manera de entender la vida: la de Jesús de Nazaret. Creer en el Resucitado es dar testimonio de que la vida tiene que ser vista como la vio Jesús y hacer nuestra su causa: la construcción del Reino de Dios en nuestro ambiente.

- Predicar la resurrección hoy es afirmar que Dios está a favor de quienes siguen el camino del Evangelio. Un camino de generosidad y servicio a todas las personas, especialmente a los pobres y oprimidos... Dios está de parte de todos aquellos que viven y mueren por las razones que vivió y murió Jesús. Esta es la hermosa Buena Noticia de la resurrección de Jesús para nosotros.

Drama de la luz

Indicaciones:

- se dramatizará la lectura de Juan 20, 19-23 (la aparición a los discípulos).

- Para la ambientación se sugiere que se retome el signo del ataúd, pero en esta ocasión estará vacío.

- La escena primera consistirá en que los discípulos se encuentren desconcertados frente al ataúd vacío. Seguido a esto se dramatizará la lectura sugerida.

- Al final de esta dramatización Jesús encenderá los cirios que tendrán los discípulos en las manos. Estos, obedientes a al mandato de Jesús, comunicarán la luz a los demás jóvenes.

II. La vida

Dinámica de la vida

Objetivo de la dinámica: Cristo, por amor, dio su vida por todos, aun cuando éramos pecadores. El objetivo de esta dinámica es ver cuán capaces somos de desprendernos de nuestra vida para que otro tenga vida.

Indicaciones:

Se les indica a los jóvenes que todos se encuentran en un barco y que ocurre un accidente de tal magnitud que el barco se está hundiendo. Sólo uno se podrá salvar. Cada uno tiene tres centavos (se les proveerá a cada uno de los jóvenes los tres centavos). Cada uno de estos centavos significan vida que pueden dar a otro/s para se salve. Se hará un semi-círculo entre todos los pasajeros y colocarán una silla en el medio en donde se sentará el que resulte con más vidas (centavos). Todas las persona que están a punto de morir tiene una esperanza en esa persona que se va a salvar y a ella le dirigen diversas peticiones como son: despedidas a los seres queridos, petición de cosas que no realizaron en vida, etc.

Preguntas para los jóvenes:

- ¿Quién dio los tres centavos? ¿Por qué?

- ¿Quién conservó los tres centavos? ¿Por qué?

- ¿Quién se quedó con alguno de los centavos? ¿Por qué?

Para el propósito de la dinámica la pregunta tres es la más importante. A veces damos la vida por el otro, pero no tanto por amor a ejemplo de Jesús, sino porque no la queremos.

Otras indicaciones:

- Si el grupo de jóvenes participantes es demasiado grande se puede dividir en grupos de unos veinte.

- En cada uno de los grupos se hará la dinámica antes expuesta.

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III: El camino

Todos somos peregrinos. Vamos todos de camino. Todos los días, todas las horas, todos los minutos, sin descansar.

Hay caminos de vida y hay caminos de muerte. Caminos del bien y caminos del mal. Hay senderos que parecen rectos y conducen a la perdición, y hay senderos difíciles, que llevan a la eterna felicidad. Llamamos camino a las sendas que conducen a la perfección. ¡Hay tantos caminos! Nuestro destino es caminar. Caminar siempre hacia delante sin detenerse nunca y sin olvidar que el camino es Jesús.

Jesús es el camino hacia el Padre, porque también es la verdad o revelación del Padre, de forma que cuando los hombres conocen a Jesús, también conocen al Padre y cuando lo ven a él también ven al Padre. Jesús es el camino porque es la vida puesto que vive en el Padre y el Padre vive en él.

Cristo es y seguirá siendo “el camino, la verdad y la vida”. En estas palabras tan evocadoras encontramos la raíz de la revelación total de Cristo al hombre, que debe aceptarlo como camino si no quiere desviarse, asumirlo como verdad si no quiere caer en el error y abrirse a la efusión de la vida, la vida eterna que brota de él si no quiere dejarse absorber por ideologías y culturas de muerte y destrucción.

Nuestro camino significa querer dar una respuesta a nuestras necesidades, a nuestros interrogantes, a nuestra búsqueda. Salir al encuentro de Dios que nos busca con un amor tan grande.

Este encuentro con Dios se realiza en Jesucristo. Desde la eternidad Dios ha pensado en nosotros y nos ha amado como personas únicas. El nos llama y su llamada se realiza a través de la persona de Jesucristo, que nos dice: “VEN Y SÍGUEME”. ¡EL ES EL CAMINO QUE NOS CONDUCE AL PADRE! El nos indica la dirección del camino a seguir. “Enséñame, Señor, tu camino para que ande yo en la Verdad.”

COMPROMISO DE INICIAR EL CAMINO PASCUAL

Llegados al final de la Pascua Juvenil cada joven deberá ser capaz de comprometerse a vivir la nueva vida del Resucitado. Para eso se les invitará primero a que renuncien a todo aquello que pertenece al “hombre viejo” y que en cierta manera es signo de muerte. Luego se les invitará a reafirmar su fe en todo aquello que caracteriza la vida del “hombre nuevo”, y que es signo de vida.

 

En tono festivo el animador preguntará primero a todos: ¿Renuncian a ...? (aquí irá mencionando cada una de las cosas que aparecen en la lista que aparece abajo). Todos los jóvenes responderán al mismo tiempo: ¡Sí renuncio! Lo mismo se hará con el segundo listado pero esta vez preguntando: ¿Creen en ...? Todos los jóvenes responderán al mismo tiempo: ¡Sí creo!

 

 

 

COMPROMISO

MORIR CON CRISTO RESUCITAR CON EL

(Renuncias) (Profesión de fe)

egoísmo... ...amor

violencia... ...mansedumbre

error... ...verdad

indiferencia... ...aprecio a todos

materialismo... ..criterios evangélicos

posesión... ...desprendimiento

irresponsabilidad.... ...compromiso

tristeza... ...alegría

dominio... ...servicio

ambición... ...compartir los bienes

discriminación... ...fraternidad

esclavitud... ...libertad

cobardía y comodidad... ...valentía y sacrificio

imposición... ..respeto

fatalismo... ...providencia

venganza... ...amor a los enemigos

soberbia... ...humildad

PECADO... ...CRISTO